Uno
de los principales expertos en grasas y aceites en la década de 1950,
la Dra. Johanna Budwig, encontró que la combinación correcta de quark (un queso fresco suave alto en grasa) o queso cottage
y aceite de linaza orgánico tiene propiedades terapéuticas en la
prevención, tratamiento y hasta la cura del cáncer y otras enfermedades
crónicas. Conocido como el Protocolo Budwig o la Dieta Budwig, ¿Podría este vencer el cáncer?
Tengo
la respuesta al cáncer, pero los médicos estadounidenses no escuchan.
Vienen aquí y observan mis métodos y quedan impresionados. Luego quieren
hacer un trato especial para poder llevárselo a casa y ganar mucho
dinero. No lo voy a hacer, así que me boicotean en cada país. – Dr. Johanna Budwig
Requesón (cottage cheese) y aceite de linaza.
La verdad completa sobre la Dieta Budwig
Muchos en
el campo de la salud natural se burlan del protocolo básico de la Dieta
Budwig como irreal y no adecuado para revertir el cáncer. Hay otros
requisitos dietéticos que son parte del protocolo. Un montón de sol y el
manejo del estrés también forman parte del enfoque de la Dra. Johanna
Budwig para sanar la persona completa.
Ese protocolo básico
utiliza aceite de linaza orgánico y queso cottage orgánico.
Originalmente se trataba del aceite de linaza y el quark, un queso
blanco con textura quebradiza que se asemeja al requesón (ricotta) que
es común entre las naciones de habla alemana, los países escandinavos y
gran parte de la región de Europa del Este. Pero el quark no está
disponible en Estados Unidos. Así que se adaptó el queso cottage en
lugar de quark.
Incluso, un prominente doctor de la salud natural
fue citado como crítico de la Dieta Budwig con “curar el cáncer con
queso cottage es ilusorio”. Sin embargo, durante un período de 50 años,
Johanna Budwig tuvo una tasa de más de 90% de curación de cáncer en
Alemania entre 4,500 pacientes afectados con todo tipo de cánceres.
Algunas víctimas de cáncer que ella curó con su protocolo se
consideraron terminales.
La base científica del uso de aceite de linaza y quark o queso cottage para curar el cáncer
Como
bioquímica y física a principios de los años 1950, Johanna era una
científica principal de la Oficina Federal Alemana de Salud, comparable a
la FDA americana, pero con menos corrupción burocrática. Su tarea
consistía en ayudar a determinar lo que podría ser apropiado como
medicamentos para curar el cáncer para empresas farmacéuticas alemanas.
Una
compañía farmacéutica le reenvió solicitudes para un grupo sulfhidrilo,
que son proteínas que contienen azufre (estos sulfhidrilo eran los
aminoácidos cisteína y metionina). Esa compañía estaba considerando la
aplicación del grupo sulfhidrilo para la medicación contra el cáncer.
Los datos obtenidos de esa compañía permitieron a Budwig obtener una
visión general de los problemas relacionados con la oxigenación de las
células cancerosas a través de medios dietéticos. Las células cancerosas
no pueden prosperar en oxígeno.
Esta era un área que el ganador
del premio Nobel 1931 Otto Warburg tenía la esperanza de resolver. Él
fue quien descubrió que las células cancerosas prosperan en un ambiente
anaeróbico, pero no podrían sobrevivir en un ambiente rico en oxígeno.
Estaba buscando una enzima respiratoria que ayudara a oxigenar las
células cancerosas.
Warburg estaba consciente de que las grasas
tenían algo que ver con la inhibición o mejora de la absorción celular
de oxígeno, pero durante su tiempo las grasas no habían sido
clasificadas con sus funciones y estructuras bioquímicas. Fue en 1951
que Johanna Budwig descubrió métodos para determinar las diferentes
propiedades de los ácidos grasos.
En consecuencia, fue financiada
para continuar su investigación categorizando las diferentes propiedades
de los ácidos grasos. Johanna examinó las propiedades moleculares de
muchas grasas, determinando si estaban saturadas o no saturadas
(insaturadas), si estaban aislando ácido linoléico o ácido láurico y si
inhibían o mejoraban la absorción celular de oxígeno. Factualmente, la
mayor parte de lo que se conoce hoy sobre los ácidos grasos proviene de
los descubrimientos de investigación de mediados del siglo XX de Johann
Budwig.
Mientras investigaba las grasas y los aceites, la Dra.
Budwig estableció además, que los ácidos grasos poliinsaturados
esenciales, llamados AGPI, son componentes principales de las membranas
celulares. Sin una membrana celular que funcione correctamente, las
células pierden la capacidad de realizar procesos vitales como la
respiración celular (proceso en el que los nutrientes de los alimentos
se convierten en energía utilizable para las células, principalmente en
la forma de ATP) y la capacidad de dividir y formar nuevas células.
Los dos ácidos grasos poliinsaturados esenciales que son críticos para el soporte de la membrana celular son:
Ácido Linoléico (LA): Mejor conocido como ácidos grasos omega-6.
Ácido Linolénico (LNA) / Ácido Alfa Linolénico (ALA):
comúnmente conocido como ácidos grasos omega-3. Los ácidos grasos
poliinsaturados Omega 3 han sido reconocidos por sus propiedades
anticancerígenas y sus funciones en la prevención de todo tipo de
dolencias y enfermedades.
En 1952, la Dra. Budwig presentó un documento sobre los resultados de su investigación, declarando:
Sin
estos ácidos grasos, las enzimas respiratorias no pueden funcionar y la
persona se asfixia, incluso cuando se le da aire rico en oxígeno. Una
deficiencia en estos ácidos grasos altamente insaturados deteriora
muchas funciones vitales. En primer lugar, disminuye el suministro de
oxígeno disponible de la persona. No podemos sobrevivir sin aire y
comida; Ni podemos sobrevivir sin estos ácidos grasos.
El aceite de linaza y queso cottage trabajan para reactivar (re-energizar) las células
Johanna
Budwig había determinado que el aceite de linaza orgánico presionado en
frío era la grasa más adecuada para combinar con una proteína-de-azufre
del queso cottage o quark para la enzima respiratoria difícil de
alcanzar que podría penetrar en las células cancerosas. Estos dos
alimentos dispares fueron capaces de combinar y crear el oxígeno dentro
de las células cancerosas para restaurar la normalidad.
Una
reacción química tiene lugar cuando los grupos sulfhidrilo en el quark o
queso cottage se unen con los ácidos grasos insaturados en el aceite de
linaza. Esta reacción permite que la linaza se vuelva soluble en agua y
entre en las células para suministrar energía.
En su
investigación, los pacientes de cáncer de la Dra. Budwig habían mejorado
el suministro de oxígeno a sus células y encontraron alivio de todas
las formas de cáncer incluyendo cánceres del tracto gastrointestinal,
cerebro, mama y cáncer de piel. Junto con su dieta
especial, enfatizó los beneficios de la luz solar, la fuente natural de
la vitamina anti-cáncer vitamina D3, y la eliminación de los problemas
emocionales generalizados.
Se llegó al Protocolo Budwig a
partir de la investigación extensa, la cual ni siquiera habría sido
posible hasta sus descubrimientos de cómo determinar las propiedades de
los ácidos grasos. El queso cottage o quark con aceite de linaza puro
prensado en frío para curar el cáncer, no es sólo un capricho culinario.
Johanna Budwig
Nació
en 1908 y falleció en 2003 a la edad de 95 años por complicaciones
debidas a lesiones después de una caída en su hogar. Como resultado de
su investigación de los años 1950 en adelante, fue nominada para el
Premio Nobel Alternativo, la contraparte de Europa al Premio Nobel
sueco, siete veces.
Naturalmente, su éxito en el tratamiento de
muchos pacientes con cáncer, algunos de los cuales eran terminales,
llevó a la envidia profesional en Alemania. Fue acosada por el sistema
judicial alemán dos veces y en ambos casos los tribunales concluyeron a
su favor! Ella procedió a ampliar su conocimiento y legitimidad
obteniendo un doctorado en Ciencias Naturales para convertirse en una
naturópata.
Esto amplió su comprensión de cómo todos los seres
vivos están conectados con la energía bioeléctrica y la luz del sol.
Ella habla de cómo las semillas que absorben la energía del sol, como
las semillas de lino, se conectan con la inteligencia innata del
organismo humano para convertir la energía bioeléctrica para sus
necesidades orgánicas – de ahí proviene la parte del sol en su terapia
para conectar con el consumo de aceite de lino.
Budwig estaba
médicamente en la lista negra porque se opuso públicamente a la
quimioterapia y la radiación en pacientes con cáncer. Tampoco hizo
amigos con los fabricantes de aceites para cocinar y de ensaladas cuando
comenzó a exponer las consecuencias terribles para la salud de usar los aceites calentados, tratados químicamente, procesados o hidrogenados, que fueron impuestos al público a partir de los años 50 en adelante.
Hasta
hace poco tiempo, prácticamente todos los consumidores fueron atrapados
en el uso de estos aceites, que en realidad, contribuyen al desarrollo
de cáncer. Irónicamente, si las preocupaciones de la doctora Budwig
hubieran sido publicadas, una gran cantidad de mala salud a causa de
estos aceites habría sido eliminada.
La Dieta Budwig para combatir el cáncer de forma natural – Paso a paso
“Como
químico entrenado para interpretar datos, es incomprensible para mí que
los médicos puedan ignorar la clara evidencia de que la quimioterapia
hace mucho, mucho más daño que bien”.
– Alan Nixon, Ph.D., ex presidente de The American Chemical Society
Puedes
prevenir, e incluso. revertir el cáncer naturalmente siguiendo el
Protocolo Budwig. Utiliza estas instrucciones paso a paso para preparar
tu propia mezcla fresca de la Dieta Budwig. Luego encontrarás un vídeo
con más información, luego un poco más, y después todavía más.
Recuerda
que esta receta está basada para una persona de 100 libras, puedes
ajustar la dosis de acuerdo a las necesidades de cada individuo. Por
ejemplo, 1 cucharada de aceite de lino/linaza más 2 cucharadas de quark o
queso cottage orgánico. Para una persona de 200 libras se utilizaría el
doble. Las cantidades no son estrictas ni tienen que ser exactas.
Nunca a mano, y preferiblemente usando un mezclador de inmersión,
mezcla los dos alimentos durante 1 minuto. Esto dará como resultado una
consistencia como crema batida. (Es importante utilizar el mezclador de
inmersión porque es necesario que los dos alimentos se unan, que es la
base del Protocolo Budwig, la unión es esencial porque las proteínas de
azufre en el queso se unen con las grasas en el aceite y hacen que el
aceite se vuelva soluble en agua. Lo que hace que sea fácil de digerir y
asimilar en las células del cuerpo así puede hacer su trabajo).
Si es necesario para un consistencia más cremosa, se puede agregar
de 1-3 cucharadas de leche no-homogeneizado a la mezcla anterior.
Muele 2 cucharadas de linaza fresca marrón o doradas en un molinillo de café
durante 1 minuto hasta que tenga un aspecto aireado y esponjoso. (La
meta de moler la linaza fresca es tener una fuente de lignanos frescos,
nutrientes en la linaza que son buenos para promover la desintoxicación
celular, proteger el sistema digestivo, proteger contra la enfermedad
cardiovascular, cáncer de mama y mucho más; también hay que comer la
linaza molida dentro de 15 minutos o pierde su valor nutricional, por
eso es recomendado moler la linaza fresca así se obtiene todos sus
beneficios). Opcionalmente, agrega 1 cucharadita de miel de abeja. (Las
personas con diabetes pueden agregar canela para ayudar a regular el
azúcar en la sangre).
Ahora puedes mezclar, con una cuchara, la primera mezcla con la linaza molida. Con esto tienes lista la mezcla principal.
Adicionalmente, una vez que la mezcla principal está lista, se
puede agregar frutas orgánicas (la doctora Budwig recomienda bayas
frescas como los arándanos, moras, fresas), frutos secos (nueces, nueces
de Brasil, almendras, nueces pecanas, etc. Todas crudas para no dañar
sus aceites), cacao orgánico y especias (canela, cúrcuma, ajo, pimienta
de cayena, etc.) y tendrás un rico plato. El nombre original de este
plato es “Flax Seed Muesli“. Nota: Continúa leyendo el artículo completo
ya que una parte importante del protocolo está detallada al final; luz
solar, evitar los transgénicos (organismos modificados genéticamente) y
otras recomendaciones.
Aquí hay un vídeo con más
información. El vídeo está en Inglés, si no dominas el idioma y quieres
utilizar esta receta aún así lo recomiendo porque se puede ver lo que la
señora está haciendo y así tener una mejor idea. De cualquier manera
comparto aquí toda la información necesaria para poder seguir el
protocolo completo.
Aquellos que no tienen cáncer y sólo
están preocupados por el mantenimiento rutinario de la salud, pueden
simplemente combinar 3 a 4 gramos de aceite de semilla de lino con
aproximadamente 3 onzas fluidas de proteínas de azufre (por ejemplo,
queso de cabra, quark, queso cottage, etc.) y consumir una vez por día.
Cómo consumir la receta básica de la Dieta Budwig y algunas sugerencias
La
receta anterior no debe consumirse con otros suplementos, alimentos o
aceites al mismo tiempo. Debe ser una comida independiente. Consumir un
mínimo de dos veces por día, en la mañana y en la tarde como merienda.
La
Dra. Budwig señaló que las personas que sufren de enfermedad crónica o
terminal deben trabajar hasta consumir 4-8 cucharadas de aceite de
linaza (o linaza molida fresca en los alimentos) diariamente. Por lo
general, los límites más altos de 6-8 cucharadas son para las personas
con cáncer. Ella dijo, la gente con el cáncer de páncreas, hígado, etc.,
puede que tenga que subir lentamente con el aceite y comenzar
posiblemente solamente con 1 cucharadita a la vez, dándole así tiempo al
cuerpo para que se adapte. La Dra. Budwig señaló que los pacientes con
cáncer una vez que inician el protocolo y lo ponen bajo control, deben
continuar con una dosis de mantenimiento para evitar la recurrencia.
Se
considera una dosis de mantenimiento (1) cucharada del aceite por cien
libras de peso corporal. La Dieta Budwig toma tiempo para trabajar y en
el caso de cáncer puede tomar 3-6 meses. Muchos otros problemas de salud
pueden responder mucho más rápidos (más información sobre los problemas
de salud que se pueden beneficiar con este protocolo más abajo).
La mezcla Budwig se debe consumir dentro de los 20 minutos de hacerla. No hagas más de lo necesario y no refrigeres las sobras.
Recuerda
poner el queso cottage en el recipiente primero, luego el aceite de
linaza. Mézclalos antes de agregar cualquier otro ingrediente en el
recipiente.
Detalles sobre los ingredientes
Si deseas
probar el Protocolo / Dieta Budwig para superar el cáncer de forma
natural, es importante comenzar por la compra de ingredientes de alta
calidad para promover la curación y una salud óptima. Por ejemplo, el
aceite de linaza debe ser prensado en frío y sin ligninas añadidas
(estas se obtienen al moler las semillas frescas de linaza). Se puede
encontrar en la sección de refrigeradores de las tiendas de alimentos
saludables. Debe estar en una botella oscura y nunca debe utilizarse
después de su fecha de caducidad.
La marca de Nancy de queso
cottage orgánico contiene probióticos y enzimas que incluso aquellos con
sensibilidades lácteas (intolerantes a la lactosa) pueden tolerar. Las
personas que viven en muchos países europeos tendrán acceso al quark. El
queso no tiene que ser bajo en grasa y se puede utilizar cualquier otra
marca siempre y cuando se tome en consideración los puntos detallados
más abajo.
La compra de queso cottage de calidad inferior inhibe
la reacción química necesaria que se produce entre los grupos
sulfhidrilo y los ácidos grasos. Los conservantes y las hormonas de los
quesos de mala calidad, junto con los procesos de pasteurización con
calor elevado, destruyen la calidad de la proteína que contiene azufre.
Existen 3 problemas principales con la mayoría de los lácteos de hoy, vamos a verlos en detalle:
Pasteurización: Este es el proceso de “matar” tu
comida. El calor que se le aplica a los productos pasteurizados puede
dañar muchos de los nutrientes vitales incluyendo las proteínas, enzimas
y los probióticos.
Productos químicos: La mayoría de los productos
lácteos hoy en día están repletos de hormonas, antibióticos,
analgésicos, residuos de plaguicidas, pus y otras toxinas.
Caseína A1: Hay dos tipos de proteínas en la leche,
la caseína y el suero. En los últimos 1000 años ha habido una mutación
genética en algunas vacas lecheras que les ha causado producir un tipo
irregular de proteína llamada Beta-Caseína A1. La caseína A1 es una
proteína que para algunas personas puede ser altamente inflamatoria,
similar al gluten. Este tipo de lácteos no se encuentra en ciertos
bovinos y nunca se encuentra en humanos, cabras, ovejas, búfalos y vacas
A2.
Por lo tanto, una vez más, cuando compres productos lácteos para
la Dieta Budwig, busca comprar idealmente queso cottage orgánico, kéfir
de leche de cabra, yogur crudo o amasai de vacas A2 (bebida fermentada
similar al kéfir).
Variaciones y alternativas a la dieta original
Personalmente
me gusta optar por la versión original de cualquier protocolo que vaya a
seguir, o estudiar bastante sobre cómo funciona antes de hacer
cualquier cambio, pero cada quien es diferente y el protocolo o Dieta
Budwig tiene muchas variaciones.
Aquí puedes ver alternativas a
utilizar para los ingredientes principales, ya sea que quieres probar
algo diferente o simplemente no puedes encontrar uno de los
ingredientes:
Lácteos fermentados: Kéfir, queso de leche de
cabra, amasai o yogur no-homogeneizado (preferiblemente leche de oveja o
cabra). Asegúrate de que estos productos sean crudos o procesados a
baja temperatura y que sean orgánicos y provenientes de animales
alimentados con pasto.
Aceite (grasas): El aceite de cáñamo (hemp)
contiene un perfil nutricional muy similar al aceite de lino,
especialmente en cuanto a su contenido de ácidos grasos omega-3 que es
lo más importante y lo que se busca en el aceite de lino en la Dieta
Budwig.
Súper semillas germinadas: Chía y linaza; Estas son
dos de las semillas más densas en nutrientes del mundo y tienen
beneficios increíbles para la salud y son mejores germinadas.
Cúrcuma y pimienta negra: Hoy en día hay más
investigación sobre la cúrcuma (curcumina; ingrediente activo) para
combatir el cáncer que cualquier otra hierba en el mundo. Se ha
demostrado que disminuye el tamaño de los tumores y lucha contra el
cáncer de colon y de mama. Además, la adición de una pizca de pimienta
negra puede aumentar su absorción.
Receta alternativa para la Dieta Budwig
Nuevamente
repito que yo optaría por el protocolo original, pero he aquí una
variación de la receta la cual sin duda alguna es una mezcla de
ingredientes altamente saludables:
6 onzas de lácteo fermentado (queso cottage, kéfir, yogur o amasai de leche de cabra)
4 cucharadas de chía o lino brotado y molido
1 cucharada de aceite de linaza
1 cucharadita de polvo de cúrcuma
1/4 cucharadita de pimienta negra
Instrucciones: Mezclar todos los ingredientes en un tazón o licuadora y consumir 1 vez al día.
Esta es una comida muy saludable, se puede consumir una vez al
día para ayudar a reconstruir las membranas celulares y también funciona
como una increíble limpieza de colon. Está cargada con probióticos y
fibra fermentada que puede transformar la salud de tu intestino delgado y
colon.
El Protocolo Budwig también tiene los siguientes beneficios
La
tasa de éxito del Protocolo Budwig se ha declarado entre el 80-93% para
las condiciones crónicas de salud de acuerdo con la organización
Budwig. Este protocolo, el cual incluye la receta anterior y las
recomendaciones que verás más abajo, tiene los siguientes beneficios:
Recuperación del cáncer
Mejorar la diabetes
Curar las enfermedades de la piel eczema y psoriasis
Mejorar la artritis
Equilibrio hormonal
Mejora de la función neurológica
Curar las enfermedades cardíacas
La Dieta Budwig oficial y otras sugerencias importantes
Estas
son las recomendaciones oficiales del Protocolo Budwig, recuerda que
este es un protocolo antiguo y que ciertas recomendaciones son
específicas para personas muy enfermas y no quiere decir que no sean
saludables en general por estar en esta lista. También muchas de las
recomendaciones van a depender exclusivamente de la experiencia de la
autora del protocolo en un momento específico y sé que pueden crear
conflictos para muchas personas. Aún así, voy a tratar de compartir toda
la información que recolecte y poner algunas notas donde sea necesario.
Recuerda que cada quien es diferente y tan sólo algunas de estas
recomendaciones pueden causar cambios asombrosos en la mayoría de
personas:
Prácticas recomendadas para combatir el cáncer, y otras enfermedades crónicas, de forma natural con el Protocolo Budwig
Los jugos de verduras recién exprimidos (zumos de vegetales) son recomendados,
especialmente con zanahoria, apio, manzana y remolacha roja. Todos los
jugos naturales están bien, con especial preferencia a bebidas
completamente orgánicas.
Tres veces al día un té caliente es esencial.
Buenas opciones incluye la menta, escaramujos o té de uva. Endulza sólo
con miel de abeja cruda orgánica. Una taza de té negro antes del
mediodía está bien.
Los baños de sol son muy importantes. La Dra.
Budwig enfatizó que estar en la luz del sol es muy saludable por la
vitamina D y otros beneficios (incluso en invierno). Evita quemarte,
evite la protección solar (causa cáncer) y las gafas de sol (bloquean la
producción de ciertos nutrientes). Vamos a expandir: La luz del sol en
la piel (sin protector solar o loción) promueve la producción de
vitamina D y da energía curativa al cuerpo. Comienza despacio de modo
que evites conseguir una quemadura. La quemadura es la señal del cuerpo
de que ya excediste tu límite, así que te puedes quedar bajo el sol todo
el tiempo que desees antes de quemarte. Trabaja hasta lograr 20 ó 30
minutos bajo el sol. Espera unas horas después de tomar el sol antes de
ducharte con jabón ya que toma tiempo para que la vitamina D se
absorba en la piel (el jabón la elimina).
El aceite de coco es beneficioso y recomendado por la Dra. Budwig.
Los ejercicios son opcionales, y van a depender de
cada persona, su estado de ánimo y la fuerza que tenga, pero el cuerpo
necesita relajarse para poder curar en casos avanzados de enfermedad.
Prácticas y alimentos que debemos evitar para poder curar de forma natural
EL AZÚCAR ESTÁ ABSOLUTAMENTE PROHIBIDA. El jugo de uva orgánico se
puede agregar para endulzar cualquier otro zumo recién exprimido.
Evita grasas animales puras, como manteca de cerdo, gordo, goteo, etc.
Evita los transgénicos (organismos modificados genéticamente).
Evita aderezos para ensaladas comerciales o coberturas.
Evita la mayonesa comercial.
Evita los degradados, radioactivos y genéticamente modificados aceites de maíz, canola y soja.
Evita las carnes a menos que sean orgánica y preferentemente alimentado con pasto.
Evita la mantequilla, especialmente la margarina u otras mantequillas artificiales.
Evita todos los edulcorantes artificiales (incluyendo jarabe de maíz de alta en fructosa).
Evita todos los alimentos procesados.
Evita todos los refrescos.
Evita el agua del grifo y el agua embotellada, y usa productos libres de fluoruro. Bebe agua de manantial o agua filtrada.
Evita el recalentamiento de comida y las sobras. Come todos los alimentos recién preparados.
Evita el aceite de pescado (Esta sugerencia se debe a que los
aceites que la doctora probó estaban oxidados, pero sabemos que hay
fuentes de aceite de pescado de muy buena calidad y que poseen
beneficios, incluso para combatir el cáncer).
Evita los microondas.
Evita los aceites hidrogenados.
Evita los medicamentos (intenta de deshacerte de todos los productos farmacéuticos).
Evita los filtros solares, los cosméticos y las lociones tóxicas que se encuentran en las tiendas regulares.
Evita el pan blanco, el arroz blanco, el azúcar blanca, la harina
blanca, y cualquier otra cosa que sea un almidón simple, sobreprocesado,
o blanqueado con compuestos del cloro.
Evita la sal de mesa y use una sal marina de alta calidad de una tienda de alimentos saludables.
Encuentra alternativas más seguras a los jabones comunes, blanqueadores y detergentes.
Evita todas las vacunas.
Evita productos de soya.
Evita a tu médico. Esta podría ser la regla más importante si
quieres vivir (aunque puede ser que sea necesario en casos de
emergencia).
Sugerencias adicionales (no son necesariamente partes del protocolo Budwig)
Té verde con miel y jugo de limón. Una pizca de cayena puede ser útil también.
Un suplemento de clorofila (el alga clorela es la mejor fuente natural de clorofila que existe).
Bebe jugos verdes regularmente para asegurar una nutrición adecuada.
Come una dieta alcalinizante y totalmente libre de químicos.
Toma una gran dosis de vitamina C al día, 5,000 mg es un buen punto de partida.
Por lo menos una vez al día, una bebida de limón y piña, debido a su capacidad para mejorar rápidamente el pH corporal.
Obtener un filtro de agua para la ducha con la prioridad de eliminar el cloro.
Para los enfermos mortales, consulta a un especialista, como un
médico naturista (N.D.) que pueda proporcionar IV’s, incluyendo vitamina
C y peróxido de hidrógeno seguro si es necesario.
Utiliza vitamina B-17 para los casos malos, pero evitarlo las personas con el hígado deteriorado.
Retrasa la desintoxicación cuando una persona está gravemente enferma o inestable.
Retrasa la desintoxicación si es cáncer de hígado o riñón.
Cuida los dientes. Si hay infecciones ocultas, podrían interferir con la mejora.
Los alimentos del Protocolo Budwig dan al cuerpo lo que necesita
diariamente para ayudar a detener el cáncer. La Dra. Budwig advirtió
que se debe seguir la dieta durante cerca de tres años antes de
relajarse un poco, pero no se puede incluir regularmente alimentos
dañinos en el menú diario. Hacerlo puede permitir que el cáncer vuelva.
Ésto le ha sucedido a algunas personas que dejaron la dieta demasiado
pronto (con la dieta me refiero a no comer alimentos basura). Trata de
comer lo más naturalmente posible.
La Dra. Budwig no incluyó
fármacos o suplementos en sus pautas del protocolo. En su libro de 1999
habló en contra de ellos. Algunos pacientes eliminan las drogas
(medicamentos) lentamente bajo el cuidado de un doctor. Siempre consulta
a tu médico en estos asuntos. El aceite de lino es conocido por
adelgazar la sangre, ten cuidado con el uso de drogas adelgazantes de la
sangre, incluida la aspirina. Podría ser peligroso. Algunos
suplementos, especialmente los artificiales, pueden interferir con lo
bien que funciona la dieta, al igual que algunos medicamentos y
tratamientos como la quimioterapia y la radiación, las cortisonas, las
hormonas y los analgésicos.
Con todo lo que hemos visto tengo para
decir que este no es el protocolo completo, la Dra. Budwig también
utilizaba potente hierbas medicinales específicas y una terapia especial
de luz de rubí. Creo que el error más grande es creer que el protocolo
completo se basa sólo en aceite de linaza y queso aunque sinceramente es
una mezcla muy potente para reparar la salud de las células.
Hay
que estudiar y aprender mucho si se quiere curar una enfermedad crónica
de forma natural, hay que ser consistente y esforzarse, ya que no existe
un método mágico que funciona para todo el mundo. Algunas personas se
pueden curar con tan sólo un nutriente, mientras que otras necesitan un
cambio completo en su vida. La buena noticia es que si tomamos
el primer paso, algo tan sencillo como eliminar los refrescos y los
aceites hidrogenados, cambiándolos por zumos y alguna grasa natural,
ésto va a crear una reacción en cadena que poco a poco nos va a llevar
al lugar donde queremos que llegar. Y con tan sólo dedicarte a tí
misma/o, tu propio cuerpo y salud, te puedes curar de cualquier
enfermedad sin importar el nombre.
Información original: Libros de la Dra. Johanna Budwig
Si
quieres conseguir la información original, y completa, puedes comprar
los libros de Johanna Budwig. Sólo tres de los libros de Johanna han
sido traducidos al Inglés. Seis libros están disponibles sólo en alemán.
Los libros en Inglés se enumeran a continuación:
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